Diccionario Bio-Emocional

En este diccionario encontrarás más de 1300 enfermedades, dolencias, síntomas, partes, órganos, sistemas o protocolos para guiarte en la búsqueda del origen emocional/conflictual de las enfermedades. Esta idea parte de los estudios del dr. Ryke G. Hamer, Enric Corbera, el dr. Salomon Sellam, Anne Ancelin-Schützenberger, Mark Fréchet, Louise L. Hay, Claude Sabbah, Jacques Martel, Lise Bourbeau entre otros, reflejados y concretados en corrientes como la Nueva Medicina Germánica, la Descodificación Biológica, la Biodescodificación o la Bioneuroemoción. Todas estas corrientes, científicas y aceptadas se basan en el principio que la naturaleza no erra, no se equivoca, no existen en ella los errores sino que sigue un proceso basado en unos programas alojados en nuestro inconsciente y que nos permiten sobrevivir, protegernos, relacionarnos, movernos, etc. Así mismo, los conflictos aparecen cuando entramos en incoherencia, o sea, pensamos, sentimos y actuamos de forma distinta una de otra y no en una misma dirección. Localizando la dolencia, enfermedad, síntoma, órgano o parte en el diccionario podemos obtener una pista sobre el conflicto que vivimos pero del cual no somos conscientes. En los apartados “Conflicto” y “Resentir” encontramos estas pistas que aunque precisas, no debemos tomar solo al pié de la letra, pues es la forma que tiene el inconsciente de interpretar la realidad y no la realidad de la que nosotros somos conscientes. Por ejemplo una persona que no tenga hijos, puede tener un conflicto de hijos porque considera en su más profundo que su negocio, es como un hijo para él, o simplemente el hecho de no tener hijos puede ser el conflicto del que no es consciente.
Es recomendable informarse sobre estas corrientes y la forma de pensar que plantean, las características del inconsciente, etc. Nos ayudará mucho a mejorar la comprensión de este diccionario y a la vez la relación que tenemos con nuestra realidad.
¡Atención! Este diccionario en ningún caso debe sustituir a ningún profesional, ni al médico, ni al psicólogo ni al acompañante en Bioneuroemoción ni a nadie. Su idea es ayudarnos a complementar la forma que tenemos de observar las enfermedades, los síntomas y las dolencias con un punto de vista nuevo a la vez que ancestral y aportarnos así más luz a la gestión de nuestra salud.